Estimado/a Ignacio:
Según el libro de Manuel Lozano Leyva “De Arquímedes a
Einstein”, los diez experimentos más bellos de la Física son:
1. Arquímedes. El principio fundamental de la hidrostática
2. Eratóstenes. Medida de la circunferencia de la Tierra
3. Galileo. La caída libre de los cuerpos
4. Newton. Descomposición de la luz del Sol
5. Cavendish. La constante de la gravitación universal
6. Young. El carácter ondulatorio de la luz
7. Foucault. El movimiento de la Tierra
8. Millikan. La unidad de carga eléctrica
9. Rutheford. El núcleo atómico
10. Einstein, Bohr, De Broglie, Heisenberg y otros. La doble
rendija
Cada entusiasta de la Física, de hecho, tendrá su propia
clasificación, pero es un hecho enormemente significativo que casi todos
coinciden en que en el podio no puede faltar el experimento de la doble rendija
Desde mi humilde atalaya, no solo rompe con todas las
creencias anteriores sino que, además, tiene una profunda belleza
El experimento tiene dos aspectos impactantes:
1º El electrón, que para el pensamiento pre-cuántico era un
trozo de materia, se comporta como una onda al atravesar la doble rendija
2º Pero para mí lo más impactante es que si queremos
observar al electrón al acercarse a la doble rendija, se colapsa la función de
onda y vuelve a actuar como partícula. Este hecho sorprendente se explica
perfectamente en la parte final del videoclip del Dr Quantum ( hacia el minuto
4 ): “El electrón decidió actuar de manera distinta…!!!como si fuera consciente
de que le observaban!!!”
¿Electrones conscientes?.. no es una película de ciencia
ficción……es Mecánica Cuántica
Pero toda gran teoría necesita como el comer alguien que se
devane los sesos hasta encontrar una explicación pedagógica, visual, que la
pueda entender un niño de diez años
En links adjuntos encontraréis lo mejor que he encontrado:
La forma de explicarlo del Dr. Quantum es deliciosa
Para apoyar un poco la explicación con algún texto, he
incluido dos artículos, uno de Investigación y Ciencia y otro de New Journal of
Physics
No podía terminar este escrito sin dar mis más sinceras
gracias a Manuel Lozano Neyva, catedrático de Física en la Universidad de
Sevilla, por los ratos tan buenos que he pasado leyendo su libro “De Arquímedes
a Einstein”